viernes, 26 de febrero de 2016

El cielo ajedrez de Antonio Agudelo

                                                                 EL CIELO AJEDREZ 
Antonio Agudelo
Prólogos de Alejandro López Andrada y Verónica Aranda
Epílogo de Salvador Negro
9 Ilustraciones de Juan Carlos Mestre (a color) 
Madrid, enero de 2016 
Colección Poesía, nº 9 
98 páginas, 14 x 21 cm.
Rústica con solapas
Precio: 15 euros (IVA incluido)


Antonio Agudelo es uno de esos poetas inclasificables y absolutamente necesarios. Nos trae epifanías en las que el yo poético ocupa la habitación más oscura del salitre y, como Rimbaud, puede ser “el niño conducido por relámpagos delante del cerezo”. En su ideario poético hay una visión de la poesía como un intento de suturar el espacio entre la conciencia y el mundo. Agudelo confía plenamente en el poema para representar el universo y el misterio de fondo que nos constituye. 
El poeta cordobés cuida cada palabra, se detiene en su transparencia, en su dimensión sanadora, sin dejar de lado el compromiso, porque la palabra poética es también transgresión, desobediencia a los poderes políticos.  Es este mundo de hoy, sometido a la tiranía de la tecnociencia, el poeta debe orientarse más que nunca hacia la sociedad y “salvar vidas”, no dar la espalda al sufrimiento humano.
El cielo ajedrez,  tiene distintos ritmos y temperaturas. Llega hasta el fondo de las zonas abisales para encontrarse con la vacuidad y el silencio. El fulgor y la muerte pueden estar en un mismo plano;  a través de la paradoja hay un intento de llegar a la verdad, de conectarse con la naturaleza. En este camino de depuración estilístico y espiritual propio del que ha elegido la soledad de los bosques y dialoga a diario con el cosmos, Agudelo cultiva también el haiku, después de haber comprendido que todas las cosas se relacionan entre sí de forma invisible. Que podemos percibir en cada “temblor de flores” la sacralidad del mundo y plasmarlo en diecisiete sílabas.
Un libro-objeto bellamente editado por El Sastre de Apollinaire, con nueve ilustraciones a color de Juan Carlos Mestre:
  

                                                                                                  Dibujos: Juan Carlos Mestre

EL CIELO AJEDREZ

El silencio se extiende sobre la mesa del mar y apenas nada se mueve ni busca la salida. El arlequín no entra en su misterio donde el mal apaga sus países ni desaparece en batallas de la noche funeral y vacía. La luna es limpia en el cielo ajedrez, para que nada pueda caer en el cero de Dios. Sobre la mesa el pan y los colores de las frutas en platos limpios. Eso no es la dictadura militar, no todas las palabras condenan a muerte. Aquí no hay ruinas ni se deja paso a la cruda verdad del río del silencio, su próximo ataúd. El arlequín respira su humano aliento, esa sabiduría para ser feliz el día de Pentecostés. Hay café y pasteles tricolores sobre la mesa del mar, paz en los manteles. En la oscuridad del comedor, todo volvía. Es la igualdad con el otro, la dignidad de las palabras. No hay luz más allá de la revelación de la muerte: luz insumisa, luz. Apollinaire recomienda la Revolución Industrial, ser un desobediente activo como Max Ernst que dibuja el Nuevo Mundo, no un físico cuántico de la brevedad suicida en la Casa del Sueño. Es el sufrimiento inútil, la enfermedad venérea, la tortura medieval, la guerra, la infamia y hasta la misma muerte. Luz tenaz, luz. La luna es limpia en el cielo ajedrez, no enciende los huesos en el cero de Dios.  

*

CONSEJOS  NOÉ

El palacio del rey Darío no es de oro / la calavera de los teatros vacíos / la noche está patas arriba / el viejo Heidegger con un chasquido de dedos te dice pasa / la tensión del alucinado encuentro / las bodas de Pentecostés / el robo de la dictadura militar / los niños han sido devorados por los dientes del sol / pan para el día pan / la conciencia del relámpago / el monstruo de la razón que engendra sueños / dijo William Blake / el esqueleto del poema que agoniza para ser / la carestía / Tristan Tzara envuelto en trapos paralíticos / el dolor de un hombre que llora por dentro / el sufrimiento inútil / los abecedarios mudos / las soberanías del espanto / la carroña infame / las piedras contra la perra injusticia / los fracasos lloraban por la destrucción del templo / todos los relojes del mundo han sido calcinados / la tradición tiene esa mala costumbre / de añadir almas nuevas al purgatorio / el sangriento capitalismo / cortar las entrañas de la corrupción / las misiones rojas / el tigre no bebe universo en la pérdida / la poesía no es el arte de perder / pensar la luz y ser dentro del pozo es un verano muerto / el silencio de las víctimas / la derrota tiene la dignidad que la victoria no conoce / el compromiso ha de ser un desobediente activo / no metas el dedo en el ojo de un muerto / no metas la lengua en los desastres del horror / nadie es Rimbaud / un  tipo peligroso con revólver de escarcha / el amor conoce sus instrumentos de muerte / andar con pies de plomo sobre las lecturas / huye de la creencia alegórica / la didáctica medieval / la retórica del engaño / el barroco carbonizado / todos los relojes del mundo han sido  calcinados / la tradición tiene esa mala costumbre / de añadir almas nuevas al purgatorio / vive y deja vivir / busca una felicidad responsable / el descubrimiento de América / Apolo dios de la luz abandonó Nueva York y el monte del Parnaso / y ahora es pastor de estrellas en el jardín de ciudadanos / Nueva York está en nosotros / la arboleda comunal / las cajas de música / la guarida de la mesa / la serenidad es el valle del lenguaje donde silba el perejil / la dulce vida en el cibercafé / las vacas de Chagall comen ensalada de estrellas / el vestíbulo del corazón / llegan obreros y estudiantes para la revolución francesa / desatar los nudos de los altos patíbulos / liberar a los presos / libertad es la ley / la identidad desobediente / los niños han de inventar lo maravilloso para resistir a la muerte / la vida es el valor supremo / vale la pena ser feliz / Paco Picabia cree en el poder popular / las bicicletas que hacen girar el mundo / contra la telaraña de la costumbre / la filosofía tricolor / el arca de Noé / los cisnes salvados del diluvio.

                                                                                              © Antonio Agudelo

martes, 16 de febrero de 2016

Conferencia y presentación de Necesarias Palabras (Antología solidaria por Nepal)



Copio un poema de la antología, con traducción al inglés:


 La mendiga del templo

           

            Palpa despacio los fragmentos

            de una vasija rota.

            Entre la lluvia y el anonimato,

            elige cada día un escalón del templo.

           

Marcar el territorio

            con almendras amargas

            le hace más vulnerable. 




                                             © Verónica Aranda



            The temple´s beggar



She feels slowly the fragments

            of a broken vessel.

            Between rain and anonymity,

            she chooses every day a temple stair.



Marking territory

with bitter almonds

            makes her more vulnerable.



                                       

sábado, 13 de febrero de 2016

Reseña de Café Hafa en el Babelia, por Manuel Rico





Pinchando en este enlace, puedes leer la reseña completa:

http://regorique.blogspot.com.es/2016/02/en-un-tiempo-perdido-sobre-cafe-hafa-de.html

Si quieres comprar el libro puedes encargarlo en:




Gastos de envío GRATIS para territorio español.
Para pedidos internacionales consulta en el mismo correo.


También esta disponible en las siguientes librerías:


MADRID:


      ARREBATO LIBROS, c/ La Palma, 21.

  • ENCLAVE DE LIBROS, c/ Relatores, 16.
  • ANTONIO MACHADO (Círculo de Bellas Artes), c/ Marqués de Casa Riera, 2.
  • CENTRO DE ARTE MODERNO, c/ Galileo, 52.
  • VERGÜENZA AJENA, c/ Galileo, 56.
  • LA ESQUINA DEL ZORRO, c/ Arroyo del olivar, 34.

  • ALMERÍA:

    Librería Lual-Picasso, C/ Reyes Católicos, 10. Almería

    GRANADA:

    Librería Picasso, C/ Obispo Hurtado, 5. Granada

    MÁLAGA:

    LIBRERÍA LUCES, Alameda Principal, 16. Málaga

    LIBRERÍA ÁNCORA, Plaza Uncibay, 9, Málaga

    OVIEDO:

    LIBRERÍA CERVANTES, c/ Doctor Casal, 9. Oviedo.


    VALENCIA:

    LIBRERÍA LEO, Rinconada Federico García Sánchiz, 1, bajo, Valencia

    LIBRERÍA PRIMADO, Avda. Primado Reig, 102, Valencia








    sábado, 6 de febrero de 2016

    En el centenario de la muerte de Rubén Darío




    Hoy se cumple el centenario de la muerte de Rubén Darío (1867-1916), el máximo representante del Modernismo literario en lengua española.  Os dejo un poema que dedicó a una bailarina exótica y legendaria de principios del siglo XX, Tórtola Valencia, admirada por escritores e intelectuales de la época:   



    La bailarina de los pies desnudos


    Iba en un paso rítmico y felino
    a avances dulces, ágiles o rudos,
    con algo de animal y de felino
    la bailarina de los pies desnudos.



    Su falda era la falda de las rosas,
    en sus pechos había dos escudos...
    Constelada de casos y de cosas...
    La bailarina de los pies desnudos.



    Bajaban mil deleites de los senos
    hacia la perla hundida del ombligo,
    e iniciaban propósitos obscenos
    azúcares de fresa y miel de higo.


    A un lado de la silla gestatoria
    estaban mis bufones y mis mudos...
    ¡Y era toda Setene y Anactoria
    la bailarina de los pies desnudos!



                                     Rubén Darío


                     Carmen Tórtola Valencia



    Y pinchando en este link, podéis escuchar uno de sus poemas más emblemáticos, “Lo fatal”, recitado por la actriz Marisa Paredes:










    miércoles, 3 de febrero de 2016

    Dos poemas de Café Hafa en francés

    Mi agradecimiento al poeta y traductor Rémy Durand por su excelente trabajo.




                                Muerte en Venecia
                                                              
    Dejar que el tiempo sea esta evasión
    en la sala de cine,
    esta mezcla de planos y ciudades de agua,
    cuando contamos a desconocidos
    una verdad desconcertante
    después de haber estado frente al mar,
    frente a la duda y la desidia,
    frente a amantes que observan a través de biombos.

    Esta penumbra del cinematógrafo
    nos restituye lo dejado atrás:
    un estío remoto, la costumbre
    de ascender las colinas de gladiolos salvajes
    donde te revolvía los cabellos.

    Aschenbach come fresas,
    el tinte le chorrea por las sienes,
    su delirio está hecho de música y efebos.
    Busca el último soplo de embriaguez.
    Pasa a cámara lenta la Belleza.

    v   

    Mort à Venise
                                                              
    Laisser au temps devenir cette évasion
    au cinéma,
    ce mélange de cartes et de villes aquatiques
    quand nous racontons à des inconnus
    une vérité déconcertante
    après avoir été face à la mer,
    face au doute et à l’apathie, 
    face à des amants qui observent à travers des paravents. 

    Cette ombre du cinématographe
    nous restitue ce que nous avons laissé derrière nous :
    un été lointain, l’habitude
    de monter sur les collines aux glaïeuls sauvages 
    où je te décoiffais.

    Aschenbach mange des fraises,
    La teinture coule sur ses tempes 
    son délire est fait de musique et d’éphèbes.
    Il cherche la dernière bouffée d’ivresse.
    La beauté passe au ralenti.

                                  

    Café Mabrouk, Tánger





    Elijo la quietud,

    aquella metafísica que gira

    en torno a las teteras,

    donde hay un tiempo líquido, humeante

    que transcurre entre juegos de tahúr.



    El tiempo medieval de relojes de arena

    y de los matemáticos.



    El tiempo en que el joyero corta láminas de ámbar

    y el comerciante es verbo y oratoria,

    entre los cofres y la platería

    y gargantillas bereberes.



    El tiempo de la muerte

    que pasa por el zoco en parihuelas,

    del amante que busca manchas de nacimiento

    como revelaciones.



    El tiempo en que te escondes

    y te imagino en una casa antigua

    donde entra poca luz

    y retumba el bullicio

    del sur de la medina.

               

    Bajo uno de los arcos,

    la imprecación de los mendigos.

    Recuerdos de una tarde en Udaipur.



    El perfumero mezcla

    lilas y bergamota.



    v   



    Café Mabrouk, Tanger



    Je choisis le calme,

    métaphysique qui tourne

    autour des théières fumantes,

    là se trouve un temps liquide

    qui s’écoule entre les jeux de tahur.  



    Le temps médiéval de sabliers 

    et des mathématiciens.



    Le temps où le bijoutier découpe des feuilles d’ambre 

    où le commerçant est verbe et éloquence,

    entre coffres et argenterie

    et colliers berbères.



    Le temps de la mort

    qui passe dans le zouk sur des brancards,

    celui de l’amant qui cherche des taches de naissance

    comme des révélations.



    Le temps où tu te caches

    et je te vois dans une ancienne maison

    où pénètre peu de lumière

    et où retentit le vacarme

    du sud de la médina.

               

    Sous l’une des arches

    l’imprécation des mendiants.

    Souvenirs d’une après-midi à Udaipur.



    Le parfumeur mélange

    lilas et bergamote.







    © Verónica Aranda

                                                  

                                                               © Traducción: Rémy Durand